Mercedes mantuvo su tradicional pintura plateada para su temporada inaugural en el campeonato de los autos eléctricos antes de cambiar a una decoración negra como mensaje para terminar con el racismo, acompañando a su equipo de F1.
Esto constituyó la parte más destacada de la campaña antirracismo de la marca, que también incluye el lanzamiento de un nuevo programa de diversidad e inclusión: sólo el 3% de su fuerza de trabajo se identifica como minoría étnica.
Ahora, de cara a la nueva temporada de la Fórmula E, l equipo alemán, vuelve al plateado, con las distintivas rayas azules de su división eléctrica EQ, aunque el halo del monoplaza sigue llevando el mensaje de «Fin al Racismo».
En cuanto a lo deportivo, el equipo continuará con Stoffel Vandoorne y Nyck de Vries como sus pilotos.
«Estuvimos muy contentos con Stoffel y Nyck la temporada pasada», declaró en el comunicado del anuncio el director del equipo, Ian James.